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Controladores de Detección de Gases en Refrigeración Normas de Seguridad: ASHRAE 15

Las fugas de refrigerante representan un grave peligro en entornos industriales y comerciales, lo que impulsa el despliegue de sofisticados sistemas de detección de gases refrigerantes para identificar rápidamente cualquier posible fuga e iniciar acciones para mitigar los riesgos que plantean las fugas de refrigerante. Estos sistemas de detección de gases sirven para múltiples propósitos, impulsados por una serie de objetivos dirigidos a minimizar los impactos adversos de las fugas de refrigerante y optimizar la eficiencia operativa.

Quizá la razón más importante para el despliegue de detectores de gases refrigerantes sea la seguridad. Los peligros potenciales asociados a las fugas de refrigerantes son diversos y significativos, y abarcan riesgos como la asfixia, el agotamiento del oxígeno, la inflamabilidad y la toxicidad. Estos peligros suponen graves amenazas para la salud y la seguridad de las personas que trabajan con sistemas de refrigeración o en sus proximidades.

Otra motivación principal para emplear detectores de gas refrigerante es el imperativo de reducir los costes asociados a las fugas de refrigerante. Al identificar rápidamente las fugas, las empresas pueden mitigar las pérdidas económicas relacionadas con la fuga de refrigerantes caros. Además, la reducción de las fugas de refrigerante se alinea con objetivos medioambientales más amplios al frenar las emisiones de potentes gases de efecto invernadero, contribuyendo así a los esfuerzos por combatir el cambio climático y preservar el medio ambiente.

Además, optimizar el rendimiento y la eficiencia energética de los sistemas de refrigeración es una consideración crucial. Mantener el nivel correcto de carga de refrigerante es esencial para garantizar el rendimiento óptimo del sistema y la eficiencia energética. Los detectores de gas refrigerante desempeñan un papel fundamental en este sentido, ya que avisan con antelación de las fugas, lo que permite repararlas y mantenerlas con rapidez para preservar la integridad y la eficiencia de los equipos de refrigeración.

Normas de Detección de Gases y Seguridad de Refrigerantes

Para hacer frente a estos riesgos, los organismos reguladores han establecido normas de seguridad detalladas que rigen los sistemas de refrigeración. En Estados Unidos, la norma ASHRAE 15:2022, titulada «Norma de seguridad para sistemas de refrigeración», es la norma principal para garantizar la seguridad y la sostenibilidad medioambiental de los sistemas de refrigeración. Entre los diversos componentes de la norma, hay detalles específicos para los requisitos relativos a la detección de gas refrigerante, los requisitos de instalación y las medidas de protección personal.

La sección 8.9.5 de la norma ASHRAE 15:2022 estipula.

Cada sala de máquinas frigoríficas contendrá un detector, situado en una zona donde se concentre el refrigerante procedente de una fuga, que active una alarma y ventilación mecánica de acuerdo con la Sección 8.9.7 a un punto de ajuste no superior al valor límite de exposición profesional (OEL) publicado en la Norma 34 de ASHRAE. … La alarma anunciará alarmas visuales y acústicas dentro de la sala de máquinas frigoríficas y fuera de cada entrada a la sala de máquinas frigoríficas. Las alarmas requeridas en esta sección serán del tipo de rearme manual con el rearme situado dentro de la sala de máquinas frigoríficas. Se permiten alarmas ajustadas a otros niveles (como IDLH) y alarmas de rearme automático además de las requeridas por esta sección. El significado de cada alarma se indicará claramente mediante carteles cerca de los anunciadores.

Los requisitos para la detección de gases en las salas de máquinas están claramente delineados en el texto de la norma. Además, los espacios ocupados se definen por la Clasificación de Ocupación en ASHRAE 15:2022, Sección 4. Las cámaras frigoríficas entran dentro de la categoría de Ocupación Industrial. El apartado 4.1.6 es el siguiente:

La ocupación industrial es un local o la parte de un local que no está abierta al público, donde el acceso de las personas autorizadas está controlado, y que se utiliza para fabricar, procesar o almacenar mercancías como productos químicos, alimentos, hielo, carne o petróleo.

En el apartado 7.3.3.d se aclaran explícitamente las necesidades de detección de gas refrigerante en las cámaras frigoríficas:

7.3.3 Ocupaciones industriales y cámaras frigoríficas

Las ocupaciones industriales y las cámaras frigoríficas deberán cumplir las siguientes condiciones:

  1. Los detectores de refrigerante se instalan con el lugar de detección y el nivel de alarma requeridos en las salas de máquinas frigoríficas, de acuerdo con el apartado 8.9.5.

Alarmas de gas refrigerante

Para las instalaciones de refrigeración comercial que utilizan un sistema de refrigeración centralizado para satisfacer todas las necesidades de refrigeración, la norma exige la aplicación de medidas de detección de fugas tanto en las salas de máquinas como en las cámaras frigoríficas. Así, la adhesión a estas normas garantiza la adopción de medidas proactivas para hacer frente a los riesgos potenciales asociados a las fugas de refrigerante, salvaguardando tanto al personal como al medio ambiente.

Lo que puede determinarse de esto es que, tanto dentro como fuera de una sala de máquinas o de una cámara frigorífica, se requieren alarmas audiovisuales. Fuera del espacio vigilado, las alarmas de gas refrigerante deben situarse en cada entrada, creando una medida que sirva para advertir al personal de que no entre en un entorno potencialmente peligroso.

Ventajas de los sistemas de detección de gases refrigerantes

En resumen, la implantación de sistemas de detección de gases refrigerantes es un aspecto crítico para garantizar la seguridad, eficiencia y sostenibilidad medioambiental de los sistemas de refrigeración. Detectando y abordando proactivamente las fugas de refrigerante, las empresas pueden mitigar las pérdidas económicas, reducir el impacto ambiental, optimizar el rendimiento operativo y, lo que es más importante, salvaguardar el bienestar de las personas que se encuentran cerca de los equipos de refrigeración.